viernes, abril 03, 2009

Milonga



Y así pasaron muchos días… en una mano tenía un cigarro y en la otra me temblaba con el cenicero… pareciera que nos hundíamos los dos… y sin embargo en cada centímetro de la caída tu pretendías ser una fugitiva del instante para poder perpetuar los sueños estrellados por el frio de afuera… y las noches estrelladas se volvieron algo incorrecto en la percepción de la huida de las energías, pues la oda esférica que sondea los latidos del vicio dejaron de ser parte del mundo entero… y las horas transcurrían para dejar el mundo en la deuda que nuca se pago… pero al final le di otra oportunidad al amor… contéstame o dame una señal!!!

PD: El capitán se reunió en el bar con una botella de ron… la rubia loca bailo sola y se mordía los ojos en cada parpadeo cuando la milonga desfallecía hasta el amanecer y si te despides de mi, que sea esta noche… palpitaciones y adrenalina en un cuarto de motel de carretera…

Etiquetas: