sábado, diciembre 29, 2007

Dos poemas de sor Juana Inés de la Cruz…

Las rodajas de limones eran mis únicas compañeras…. Los litros de cervezas fueron hidratando la memoria hasta quedar un pan con levadura y lagrimas metidas en el desencuentro amorosos del cuchillo que corta los limones para humedecer los labios amargos del sentimiento permanente en mi venas… trascurrieron uno segundos quise permanecer para siempre en el abanico de tu discretísimo unicelular del preámbulo eyaculatorio de tu feminidad congruente a dos poemas de sor Juana Inés de la Cruz… donde me dejaste perderme en tu veneno que se impregna como la humedad antes de la fecundidad de tu varón que ruega ser un caballero de follajes incrédulos de tu fantasía banal…